Alto rendimiento creativo
¿Qué tiene un equipo que alcanza el alto rendimiento creativo? Nos obsesionamos continuamente con la idea, con el proyecto en sí mismo, con los resultados. No somos capaces de ver que para llevar a cabo nuestra misión de sacar proyectos complejos en entornos cambiantes debemos ser creativos no solo técnicamente sino también en la forma que tenemos de trabajar juntos. Lo interesante y complejo es la interacción humana.
Para empezar, debemos juntar los ingredientes críticos: un equipo diverso. La innovación jamás surge de personas iguales y ese es uno de los grandes errores que cometen muchos. Busca la incómoda y potente riqueza que se produce en el complemento. Es increíble poder ensamblar pensamientos diferentes para poder mirar los obstáculos y éxitos desde múltiples perspectivas. Solo la diversidad te podrá dar este regalo. Solo la diversidad se acerca a la verdad y a la innovación.
Pero esta unión es solo el principio. Un equipo diverso necesita ser alimentado continuamente y descubrir día a día nuevas formas de interactuar. Es necesario potenciar el talento. No podemos confundir la estructura de organización con la de comunicación. La organización no puede jamás obstaculizar la comunicación libre y abierta. Necesitamos líderes, mentores, directores, si. Pero también necesitamos estimular la autonomía. Ofrecer sugerencias cuando sea necesario pero también apartarse para dar espacio para crear. Guiar pero también meternos “en el barro” cuando otros necesiten propuestas, ideas, consejos.
La responsabilidad de descubrir y solucionar problemas tiene que ser asignada a cada persona del equipo, desde el director hasta el becario, desde el comité hasta la línea de montaje. Quizás la persona que está mas cerca del cliente es la que descubre los mayores obstáculos. Cada uno tiene que tener la habilidad de detectarlos y sugerir cambios. La confianza de dar libertad para llevar a cabo sus propias soluciones. La satisfacción de arreglar lo que esta roto es enorme y debemos expandir esta sensación en todos los rincones de la empresa.
Sin franqueza no puede haber confianza. Sin confianza, la colaboración creativa es imposible.